Más que una Europa de distintas velocidades, lo necesario es una Europa con más integración y más eficiente. El discurso europeísta, ahora, necesita solventar los problemas reales para la ciudadanía y ofrecer propuestas a los socios que les ayuden a cumplir esos cometidos. Ello supone trabajar para la seguridad interior y exterior, con una política de seguridad y defensa común que pueda ser ofrecida a todos los socios de la Unión Europea (UE); a su vez, trabajar en la seguridad económica, con medidas de crecimiento para un mejor estado de bienestar, que facilite el crecimiento y los puestos de trabajo y que sea competitivo con otros países de fuera de la UE que no sustentan ese estado del bienestar.

España, recordó el secretario de Estado para la UE, Jorge Toledo Albiñana como invitado al Almuerzo-Coloquio del Comité Español de la LECE, es ya sujeto en la toma de decisiones, después de haber sido durante muchos años objeto de las mismas al ser país receptor. Además, está ya en el núcleo de toma de decisiones de la UE, junto con Alemania, Francia e Italia.

La reciente participación del Presidente del Gobierno español, mariano Rajoy, en la minicumbre de Versalles con esos tres países para marcar el camino de Europa así lo ratifica. Además, como recordó Jorge Toledo, Mariano Rajoy recibió antes al presidente francés, Francois Hollande, para aportar el punto de vista del Gobierno español para Europa. Finalmente, España estuvo en la cumbre de países del sur de Europa para preparar la celebración del 25 aniversario del Tratado de Roma, y participó activamente en la declaración realizada.

Precisamente, ese 25 aniversario será el primero con una declaración sin el Reino Unido. La crisis del Brexit, junto con la de los refugiados, se han sumado a una de las peores crisis económicas desde la fundación de la UE ahora hace 60 años. La nueva posición en relación con la UE de los Estados Unidos, con su nuevo presidente Donald Trump, también ofrece un nuevo contexto.

Ante todo ello, Jorge Toledo remarcó que España debe aprovechar su posición a partir de ser vistos, ahora, con mucho interés por la recuperación económica que ha experimentado el país. Desde el Gobierno, indicó, se puede influir en los dossieres del futuro de Europa y para recuperar la confianza de la ciudadanía: España está en una posición inmejorable al no existir populismos que, en otros países europeos, han aprovechado la situación para captar la atención de los ciudadanos desencantados. El proceso de recuperación económica que se vive en Europa debe ser uno de los elementos para reducir esos populismos.

El acto fue presentado y moderado por el presidente del Comité Español de la LECE, Francesc Homs i Ferret.