Almuerzo-Coloquio con el Secretario General del EMMI, responsable del Euribor, Guido Ravoet: Europa necesita grandes bancos inversores paneuropeos para poder competir globalmente
(19/05/2017) Los reguladores deben facilitar la competitividad del sector bancario en Europa. El modelo de grandes bancos inversores y paneuropeos es el más válido. A su vez, cabe imponer una cultura que genere confianza a usuarios y accionistas. El secretario general del European Money Markets Institute (EMMI), Guido Ravoet, recordó también en el marco de un Almuerzo-Coloquio LECE que espera que la reforma del Euribor sea factible en 2018. El acto, organizado por el Comité Español de la LECE en colaboración con el Círculo Ecuestre de Barcelona, tuvo lugar el pasado 11 de mayo.

El sector bancario se recupera, pero de forma modesta y frágil, tanto ante los usuarios como para los mismos accionistas. Los bancos están en el centro de la economía europea. A nivel operacional y cultural hay cambios, y se debe innovar ante una sociedad digital, generar confianza en el sistema financiero y responder mejor a las necesidades de los clientes. El secretario general del European Money Markets Institute (EMMI), Guido Ravoet, remarcó que para seguir siendo competitivos, y los reguladores deben respetar la diversidad en el modelo bancario europeo.

En este sentido, durante el Almuerzo-Coloquio LECE celebrado en Barcelona el pasado 11 de mayo, Ravoet cree que los reguladores deben facilitar la competitividad de la banca europea. La crisis ha generado mucha normativa, necesaria, pero de nivel bajo por la rapidez que obligaba el momento. Ahora, con más tiempo, se puede hacer mejor. Y la mejora pasa por actuar en el modelo bancario.

La falta de una estrategia común de modelo bancario europeo permite a los competidores externos posicionarse mejor para financiar a la economía global. En los Estados Unidos, la regulación post-crisis ha permitido a sus bancos conseguir altas cuotas de mercado, y se han reforzado internamente. Los top 5 bancos norteamericanos han contabilizado en 2016 un sesenta por ciento del mercado total. Además, cabe tener en cuenta también a nuevos actores como las fintech o grandes corporaciones no del sector -Google, Facebook, Amazon- que ya ofrecen o pronto ofrecerán productos y servicios en la cadena de valor más allá de sistemas de pago, y con una perfecta harmonía con las necesidades de los usuarios.

En este entorno, el Secretario General del EMMI, cree que la estrategia europea pasa por grandes bancos inversores paneuropeos y fuertes con sus sedes centrales en Europa. Habrá objeciones, dijo el invitado, pero los efectos de un hipotético fracaso es menor en clave de impacto en el PiB en la zona euro que si el banco opera solamente en su país. Y, como recordó Ravoet, el sector financiero debe aprovechar el avance de la Unión Bancaria. Permitirá la racionalización, sinergías y convergencia en la supervisión bancaria. En definitiva, un modelo sostenible y fuerte para actuar en el mercado de capitales. Las empresas y particulares europeos deben poder obtener financiación de sus propios bancos y no de, por ejemplo, los norteamericanos.

Todo ello pasa indefectiblemente por recuperar la confianza en la banca. Y aquí cabe resaltar la importancia de la proactividad en el mismo sector financiero para potenciar una cultura interna de transparencia y credibilidad ante el cliente. No vale solo la regulación. Es bueno que la Autoridad Bancaria Europea haya integrado el riesgo de la conducta del banco ante el cliente como variable dentro de el test de estrés de los bancos. Pero los propios bancos deben entender que ellos deben actuar para promover conductas de confianza como imperativo económico para su recuperación.

El nuevo Euribor

Sobre la institución que Ravoet representa, el EMMI, el invitado recordó que actúa para promover iniciativas de integración del mercado financiero europeo. La propuesta de reforma del Euribor -no basada solamente en estimaciones de expertos sino que incluir las operaciones reales de los bancos para ser lo más realista posible- aún no ha sido aceptada por las instituciones europeas.

Para que cumpla completamente con la regulación, Guido Ravoet confirmó que el EMMI está preparando una metodología híbrida. En ella, el cálculo del Euribor partiría de las operaciones diarias de cada banco; si ese no llegase al mínimo, replique montre se mirarían las de mercados similares. Si aún no fuesen suficientes, entonces se recurriría al juicio de los expertos. En principio, el Secretario General del EMMI espera que a finales de 2018 esté listo.

La presentación del invitado fue llevada a cabo por el vicepresidente de BArcelona Centre Financer Europeu, Luís Herrero, junto con la intervención del director del Institut d’Estudis Financers, Josep Soler. El acto fue inaugurado por el presidente del Comité Español de la LECE; Francesc Homs i Ferret.