La posición de la Unión Europea (UE) ante los casos E.On-Endesa-Gas Natural y Abertis-Autostrade son muestras de hacia donde camina actualmente la política de la competencia en Europa. En el primer caso, la UE puso en duda la OPA de Gas Natural a Endesa. En el segundo caso, la Comisión Europea ha condenado la obstaculización que ha hecho el gobierno de Italia para evitar la fusión de Abertis y Autostrade para crear la mayor empresa mundial de autopistas.

Sin referirse a esos ejemplos, el presidente del Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC), Luís Berenguer, remarcó durante el último almuerzo-coloquio del Comité español de la LECE que en la política de la competencia europea “parece que esté mal la creación de ‘campeones’ nacionales, y que esté bien la creación de ‘campeones’ europeos. De hecho, los segundos tienen más mercado que los primeros”.
Además, y a preguntas de los asistentes, Luís Berenguer recordó que hay mecanismos, como las resoluciones del Tribunal de Justicia Europeo, para que el Gobierno italiano anule la Ley que ha creado expresamente para evitar la fusión Abertis-Autostrade.

Mayor independencia

Entrando ya en el ámbito de la competencia en España, Luís Berenguer destacó que las modificaciones que se harán quieren potenciar la independencia en los nombramientos, las instrucciones y las resoluciones de la nueva Comisión Nacional de Competencia. El primer paso será el fin de la dualidad existente en España desde la creación en 1963 de el TDC por un lado y del Servicio de Defensa de la Competencia por el otro.

El Presidente y los consejeros de la futura Comisión serán nombrados por el Gobierno a propuesta del Ministerio de Economía y con previa audiencia de la Comisión de economía del Congreso de los diputados. Luís Berenguer remarcó que no pueden ser cesados directamente por el Gobierno, y que el mandato es de seis años sin renovación. En lo que se refiere al responsable de la instrucción de los expedientes, el Director de Investigación, sí que será nombrado directamente por el Gobierno a propuesta del Ministerio de Economía. El actual presidente del TDC afirmó que actualmente se está revisando ese último apartado del Anteproyecto de Ley, en contestación a la preocupación expresada por los asistentes, en relación al grado de independencia que pueda tener el instructor de los expedientes si es un cargo nombrado directamente por el Gobierno.

Sobre la tramitación de expedientes, Berenguer valoró positivamente el que sea la misma Comisión Nacional de Competencia quien decida sobre ello en lugar de actuar a instancias de lo que marque el Ministerio de Economía, como ocurre actualmente. Aun así, hay excepciones, vinculadas según indica el Anteproyecto a temas de interés general, en las que el Gobierno podrá pronunciarse sobre las resoluciones de la Comisión. Es el caso de, por ejemplo, las resoluciones que prohíban la concentración.

Luís Berenguer recordó que la mayoría de gobiernos europeos se reservan siempre su intervención cuando se tocan temas de política industrial interior. De todos modos, el Presidente del TDC habló del caso de Alemania, en el que de 36.000 expedientes resueltos solamente en 16 el Gobierno alemán se ha separado de la decisión del organismo homólogo en ése país. Uno de ellos fue el del acuerdo entre la, otra vez, eléctrica E.On y la gasista Gazprom. Luís Berenguer también hizo hincapié en la posibilidad que tendrá la futura Comisión para abrir contenciosos a administraciones que hayan aprobado normativas contrarias a la competencia.

El almuerzo-coloquio fue presentado por el presidente del Comité español de la LECE; el senador Carles Gasòliba, y moderado por el periodista José Martí Gómez.