9 noviembre, 2022

Guerra en Ucrania: Europa quiere construir desde la libertad

La guerra en Ucrania ha ratificado que vuelven los bloques en el mundo. La Unión Europea aborda el conflicto desde el principio de la libertad.

La Unión Europea (UE) se construyó desde la libertad de sus estados miembro. Esa libertad se ha menoscabado en la guerra en Ucrania. Ese contexto fue el punto de partida del Seminario «Las consecuencias de la guerra en Ucrania: hacia más inestabilidad en el Mediterráneo?», organizado por el Comité Español de la LECE en colaboración con Banc Sabadell y en el marco del programa Hablamos de Europa, de la Secretaría de Estado para la UE. La celebración tuvo lugar en la sede de Banc Sabadell en Barcelona el pasado 25 de octubre.

La inauguración la llevó a cabo el presidente del Comité Español de la LECE, Francesc Homs i Ferret, y del presidente ejecutivo del Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed), Senén Florensa. El  miembro de la junta directiva del Comité español de la LECE, Patrick Trezise, dio la bienvenida a los asistentes en en nombre del primer vicepresidente de la Junta y presidente de Banc Sabadell , Josep Oliu.

La primera mesa redonda, moderada por el periodista de La Vanguardia Xavier Mas de Xaxàs, abordó las repercusiones geopolíticas de la guerra en Ucrania en el espacio euro-mediterráneo.

El embajador Eugenio Bregolat, quien ostentó el cargo de embajador de España en Rusia y en China, remarcó que el problema viene de la desintegración de la Unión Soviética (URSS). La promesa incumplida de occidente al último presidente de la URSS, Mijail Gorbachov, de que la OTAN no se ampliaría hacia el Este es el origen de los problemas actuales. El posterior presidente ruso, Borís Yeltsin, pidió el ingreso del país a la OTAN. No avanzó, pero se invitó a Ucrania y Georgia para que sí entraran. El actual presidente Vladimir Putin reforzó su posicionamiento con el conflicto de Crimea en 2014, que ha continuado con la actual guerra en Ucrania.

Eugenio Bregolat considera que, finalmente, se ha vuelto a generar un mundo con dos bloques: Estados Unidos-Europa frente a China-Rusia. Es interesante, dijo el Embajador, cómo China aboga para una integridad territorial y soberanía estatal para Ucrania. Por ello intenta mediar en el conflicto, animando a Alemania y Francia a participar. Este es un punto importante para pensar en un cierre del conflicto.

Vuelve a haber 2 bloques en el mundo

El segundo ponente en esta mesa geopolítica fue el coordinador de políticas con los vecinos del Sur, Oriente Medio, Turquía, Rusia y Asia Central DG Trade de la Comisión Europea, Arunas Vinciunas. El representante europeo fue claro abogando por neutralizar el chantaje de Rusia y en ayudar a Ucrania. Incidió en la necesidad de mejorar los acuerdos comerciales con la vecindad meridional, haciendo énfasis en las relaciones con los países mediterráneos.

Cerró este primer bloque el fundador del Centro de Estudios e Investigación sobre el Mundo Árabe Contemporáneo, Bichara Khader. Dio la visión de cómo los países del sur del mediterráneo tienen distintos posicionamientos ante la guerra según la historia, los intereses nacionales y la geopolítica regional. Así, Siria es favorable a Rusia. El Líbano, Kuwait y Libia han sido hostiles. Para la mayoría de los países árabes, dijo Khader, es una guerra entre europeos que revela una especia de nostalgia de guerras frías para separar y no integrar, para reforzar el liderazgo americano y dar alas a la OTAN.  Es por ello que esa posición neutral o poco clara de los países árabes se basa en un resentimiento hacia occidente. Geopolíticamente, la guerra de Ucrania desvía la atención de otros conflictos enquistados en el Mediterráneo o en África y provoca una recomposición de las alianzas internacionales.

 

Las dificultades económicas de la guerra

En el segundo bloque del seminario se concretaron los aspectos económicos de la guerra, sobretodo en el ámbito de las materias primas y la energía. Moderados por el actual presidente del Comité Portugués de la LECE y antiguo ministro de Asuntos Exteriores de Portugal, Antonio Martins da Cruz, los ponentes concretaron distintos aspectos de los efectos económicos del conflicto.

El catedrático de economía de la Universitat Pompeu Fabra, Albert Carreras, remarcó que hay serias dudas sobre las represalias económicas hacia Rusia que la OTAN, los Estados Unidos y la UE han aplicado. De momento, como remarcó el segundo ponente, el jefe de estudios del Instituto Agrícola Catalán de Sant Isidre, Javier Santacruz, los bloqueos en la exportación agroalimentaria que Rusia ha hecho hacia Ucrania supone que la UE deba buscar otras fuentes de suministro, empezando por las propias cosechas de los estados miembro. Hablamos, básicamente, de cereales, aceites vegetales y oleaginosas.

La guerra afecta a  la energía y la alimentación

Finalmente, el director gerente del Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed), Roger Albinyana, se centró en el tema energético. Albinyana considera que estamos en una situación compleja  desde el punto de vista de gestión de recursos energéticos a nivel europeo. Lo más importante es facilitar la cooperación de forma regional y multilateral. Es un error solamente la negociación entre la UE y los países del sur del mediterráneo. Debe haber una negociación interregional, según Roger Albinyana, que permita integrar a los países del sur y el este del mediterráneo para un espacio común energético.

Porque la realidad es que es imposible cubrir con Argelia y Egipto el gas que ya no llega desde Rusia. El hidrogeno verde, con acuerdos ya entre la UE y Marruecos y Egipto para que produzcan y exporten, es mas factible pero a un plazo de dos o tres años, y con la necesidad de generar infraestructuras. Finalmente, Albinyana remarcó que a nivel de la producción de energía limpia se contempla como un elemento para encauzar la colaboración entre la UE y los países del sur del mediterráneo.

Las conclusiones y clausura fueron a cargo del presidente del Comité Español de la LECE, Francesc Homs i Ferret. El Presidente recordó que Europa se ha construido desde la libertad, y esto es una complejidad para su gobernanza. Si un país quiere salir de la Unión Europea, como Gran Bretaña, la respuesta no es una guerra contra ese país. Aun y así, Homs remarcó que puede ser que la guerra de Ucrania sea la vía de entrada para reencontrar las relaciones con Rusia, porque la historia de Europa es también la historia de Rusia. Pero siempre bajo el manto de la libertad. Europa está buscando ahora un modelo de gobernanza cooperativo, con políticas unitarias que refuercen el camino europeo, en el que la sociedad civil tiene mucho que decir. Sin la sociedad detrás, Europa es débil. Ahora es el momento de reforzarla como se hace, dijo Francesc Homs i Ferret, desde el Comité Español de la LECE y la LECE internacional.

otras actividades